¿No sabes cómo pillarle el punto a la carne?
Marcada, poco hecha, al punto, hecha, muy hecha, …
Aunque lo ideal es comerla poco hecha para apreciar todo su sabor, sabemos que no hay unanimidad. Por eso, sigue leyendo si quieres conseguir el punto medio perfecto, ese punto exacto en el que la pieza de carne mantiene toda su jugosidad; sellada por fuera y un 50% de rojo intenso por dentro.
Lo primero y fundamental, es que la superficie del asado esté bien caliente.
El tiempo de cocción dependerá del gusto de cada uno, del punto que se le quiera dar a la carne y del tipo de corte.
Y aquí está la clave: como regla general, piensa que una pieza de dos centímetros de grosor necesita un minuto por cada lado para quedarse “poco hecha”, dos minutos para “antes del punto” y cuatro minutos para que quede “al punto”.
¿Cómo saberlo sin controlar el reloj?
Durante el asado, los jugos salen a la superficie y a través de ellos, puedes comprobar el punto de la carne. Cuando los jugos comienzan a salir, la pieza de carne se encuentra en un punto entre “poco hecha” y “al punto”. Cuanto más oscuros son los jugos, más cocida está la carne en su interior.
En cualquier caso, es esencial no tocar la pieza de carne mientras se está asando, sólo para darle la vuelta.